Focaccia sabrosa y esponjosa

Masas y otras piezas | 6 Comentarios

A mi suele gustarme una masa de pizza fina y crujiente que soporte el peso del sus ingredientes. De hecho, en muchas pizzerías lo que verás como focaccia no es más que una masa de pizza en formato más pequeño regada con aceite y ajo o tomate y albahaca, por ejemplo. Por eso, esta que te propongo a continuación no tiene nada que ver a la masa de pizza que te enseñé en este post . Las dos son muy buenas, valen tanto para pizza como para focaccia y, además, satisfacen todos los gustos ya que hay a quien gusta una masa fina y crujiente, como a mí, y otros que la prefieren más gruesa y esponjosa.

Si eres del segundo grupo, esta es tu receta perfecta: una masa diferente, esponjosa, muy alveolada y tremendamente sabrosa. Esto solo se consigue con una masa de mayor hidratación, una harina que ofrezca mayor extensibilidad y una fermentación en bloque.

Ingredientes para una focaccia con carácter

  • 250 gr harina de espelta blanca
  • 250 gr harina de fuerza
  • 300 gr de agua
  • 2 gr de levadura
  • 5 gr de sal
  • 10 gr de aceite

Como preparar una focaccia suave y sabrosa:

Vamos a someter a nuestra masa a una autolisis durante al menos media hora: mezcla el agua y harina para favorecer la formación del gluten. Aparta un poco de agua para diluir la levadura y agregar más tarde, ya que en la autolisis se suele prescindir de la actividad leudante. No es necesario mezclar perfectamente ya que solo necesitamos que la harina comience a hidratarse y formarse la malla de gluten. He elegido para esta focaccia la harina de espelta blanca ya que ofrece mayor extensibilidad y elasticidad a la hora de estirar la masa.

Al cortar una buena porción de focaccia, verás que esponjosa es

La harina blanca de espelta es ideal para pizza y focaccia caseras ya que forma una masa tremendamente elástica.

Mezcla la levadura con el resto del agua y agrega  a la masa junto con la sal y el aceite. Trabaja profundamente a mano o a máquina hasta conseguir una bola lisa y perfectamente amasada. Déjala reposar un rato hasta que se relaje y veas que ha empezado a fermentar aumentando su volumen. Prepara, mientras tanto, una bandeja de horno de 26×3 cms forrándola con papel de horno y úntala con aceite de oliva.

Estira la masa sobre la bandeja con los dedos engrasados y, forrada con papel film, métela en la nevera durante al menos 12 horas. Sácala 3 o 4 horas antes de hornearla para atemperar y leudar lentamente. Si notas que la superficie ha formado costra por el frio, pulveriza con un poco de agua. Pasadas dos horas, unta tus dedos con aceite y “ahueca” toda la masa para que la masa leude igual por todas partes. El tiempo de fermentado final dependerá de las condiciones de temperatura del momento.

Reparte el alveolado de la masa ahuecándola con los dedos. El éxito esta asegurado

Cuando esté lista y bien esponjosa, añade los ingredientes elegidos (mozzarella, cherries, orégano) y hornea a 250ºC durante unos 25-30 minutos o veamos que la masa esta dorada y el queso derretido.

Una focaccia tierna y jugosa es un éxito seguro

Si vas a usar esta masa para pizza, estírala en una bandeja más grande ya que, para mi gusto, una pizza debe ser más fina que una focaccia.

6 Comentarios

  1. Laura

    Casi los mismos ingredientes que yo uso. Qué rica queda!

    Responder
    • Iván Alonso

      En mi casa ha sido un exitazo…Pronto caerá otra diferente.

      Responder
      • Mery Jou

        Que buena pinta tiene ????.. jooo no sabía que tuvieras esas manos TAN MÁGICAS

        Responder
  2. Joana

    Madre mía que pinta!!! Me encanta. La querría hacer, pero harina de espelta, tengo la integral, le pongo esta y algo más de agua o harina blanca?
    Muchas gracias y saludos!!

    Responder
    • Iván Alonso

      Hola Joana, antes de nada, gracias por visitarme. Esta receta que propongo en el artículo es realmente versátil ya que lo mismo vale para una focaccia bien esponjosa, como para una base de pizza de miga tierna y alveolada….y se me ocurre que hasta unas buenas chapatas.
      En cuanto al tipo de harina, es mejor que dejes la integral para otro tipo de preparaciones, ya que su contenido en salvado (la cascarilla) va a evitar que se formen esos alveólos tan bonitos. Usa sin problema la harina simple de trigo, te va a dar un resultado muy bueno también. Solo ten en cuenta que cada harina tiene una capacidad de admisión distinta de líquido; así que reserva 50 mililítros de agua y ve agregando si lo ves necesario. Ya me contarás que tal fue el resultado.

      ¡Un saludo!

      Responder
  3. Mery Jou

    Que buena pinta tiene ????.. jooo no sabía que tuvieras esas manos TAN MÁGICAS

    Responder

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información sobre protección de datos:

Responsable: Iván Alonso Jiménez.
Fin del tratamiento: Controlar el spam, y gestionar los comentarios.
Legitimación: Tu consentimiento.
Comunicación de los datos: No se publicarán los datos, salvo por obligación legal.
Derechos: Acceso, rectificación, portabilidad u olvido.
Contacto: panescongarra@gmail.com

Abrir chat
1
WhatsApp con Panes con Garra
Hola 👋
¿En qué puedo ayudarte?